Los supuestos amores imposibles siempre están marcados por algún tipo de diferencia entre los que lo quieren llevar adelante. Un amor imposible es aquel donde sólo uno es el que ama, un amor que no es correspondido. Puede también que sea correspondido pero imposible. A veces nos enamoramos de la persona menos indicada, lloramos en silencio, o nos alegramos con solo verlo o estar cerca. ¿Quién no ha vivido un dolor profundo a causa de un amor no correspondido? Cuando más nos aferramos, cuando más insistimos en algo no se nos da, con el amor pasa lo mismo, mientras más insistimos en tenerlo no lo logramos, lo mejor del amor es que precisamente llega cuando dejas de preocuparte por ello. Debemos aprender a desprendernos de nuestros deseos y esperar los resultados de forma tranquila y confiando en que llegaran, pero esto no significa perderlos de vista. Con la madurez, llegamos a comprender que la felicidad no está en tener lo que se quiere sino en querer lo que ya poseemos. En vez de invertir tanta energía en un amor no correspondido, deberíamos buscar, cuidar y amar a quien nos corresponde con su amor.