Lo amo con toda la fuerza de mi naturaleza apasionada, con todo el ímpetu de mi juventud y de mi sexo. Cuando me pregunto a mí misma por qué siento este amor, no sé qué contestar, ni me importa explicarlo. Supongo que esta especie de amor no es un resultado del razonamiento y de la clasificación...

En el fondo es bueno y lo amo por eso, pero podría amarlo también sin eso...

Es fuerte y apuesto y lo amo por eso, lo admiro y me siento orgullosa de él, pero podría amarlo sin todas esas cualidades. Si fuera tonto podría amarlo, si fuera débil lo amaría, y trabajaría por él, y sería su esclava, y rezaría por él, y velaría junto su cama en el momento de mi muerte.

Sí, pienso que lo amo meramente porque es mío y masculino. No hay ninguna otra razón, supongo. Y sigo pensando que esta clase de amor no es producto de razonamiento y estadísticas. Simplemente ocurre; nadie sabe cuándo, y no puede explicarse. Y tampoco se precisa hacerlo.

Esto es lo que pienso. Pero sólo soy una muchacha, la primera en ocuparse de este asunto, y puede ocurrir que en mi ignorancia e inexperiencia no tenga razón.

El diario de Adán y Eva- Mark Twain

-Sentir que siento lo que Eva sentia por Adán...